Cuando Neuquén tuvo su propia moneda y le daba a “la maquinita”
“Los más viejos recordarán muchas de las crisis en las que a gente buscaba cualquier cosa de valor antes que el peso argentino, pero hay episodios que quedaron guardados en la historia y que son poco conocidos para la mayoría”, escribe el periodista de LM Neuquén, Mario Cippitelli.
En diálogo con Radio NQN Digital, Cippitelli cuenta que en Neuquén ocurrió un hecho muy singular cuando el territorio recién daba los primeros pasos y un gobernador, frente a la indiferencia de los pobladores hacia la moneda nacional, decidió crear una local que se llamó el “peso neuquino”. El autor de esta iniciativa fue el gobernador Justo Sócrates Anaya, el segundo mandatario del territorio luego de la gestión de Manuel Olascoaga.
En esos tiempos, Neuquén era Territorio Nacional. Al gobernador lo designaba el Gobierno central en Buenos Aires. La capital neuquina por entonces era Chos Malal, donde el peso chileno era “moneda corriente”.
Al igual, que las pepitas de oro, con la que transaban los pirquineros del norte. Pero nadie quería el Peso Argentino. Como ayer, como hoy, la historia se repite.
La gente no quiere el peso argentino. Trata de sacárselo de encima porque “queman”. Y como en tiempos pasado, cualquier moneda extranjera sirve de refugio frente a una economía convulsionada.