
El grupo de empresarios que integran la familia Neuss y los dueños de Havanna, ganó el desempate por la privatización de la venta de electricidad del complejo hidroeléctrico y se adjudicó dos de las cuatro represas en juego. Las propuestas sumaron 226 millones de dólares en total. Ambos activos representan alrededor del 4% de la generación eléctrica total.






















