“La ventana para acelerar el desarrollo de Vaca Muerta es ahora”
El proyecto Vaca Muerta Oil Sur, que comprende un oleoducto y puerto de exportación en Río Negro, permitirá descomprimir la demanda de infraestructura de transporte para Vaca Muerta. Así lo confirmó el presidente y CEO de la petrolera YPF, Horacio Marín que participó de las 11° Jornadas de Energía del Diario Río Negro.
El proyecto de exportación de petróleo de Vaca Muerta es necesario para tratar el cuello de botella de la capacidad de transporte. El primer tramo, que ya está en construcción, parte del yacimiento Loma Campana, en Vaca Muerta y conecta con la estación de bombeo de Allen, en Río Negro. Desde allí se construirá el segundo tramo, que irá hasta Chelforó y desde allí a Punta Colorada.
«Ya tenemos en la calle la licitación para el tramo 2 del proyecto, que rompe el cuello de botella de transporte en Argentina. Para fines de agosto ya estará la licitación. Los tubulares también los licitamos y en cuanto al puerto y los tanques de almacenamiento, estamos haciendo el project design (diseño del proyecto), que va a salir rápidamente», detalló el referente.
Indicó que dos empresas norteamericanas ya expresaron interés en la terminal portuaria, que se ubicará en las costas de la provincia. «Una de ellas es Energy Transfer. Hasta el 31 de diciembre estamos negociando con ellos. Nuestra idea, si deciden invertir en Argentina, sería sumarla con el 50% del capital accionario», indicó Marín.
La empresa de transporte de hidrocarburos de Estados Unidos es un potencial inversor no solo en el proyecto Vaca Muerta Oil Sur: «es una de las compañías que podrían desarrollar e invertir para las tres cañerías del LNG (gas natural licuado), pero para eso falta un poco más», señaló.
Las proyecciones de la empresa apuntan a ya poner en operación las maquinarias para el movimiento de suelo en noviembre de este año. El ducto tendrá capacidad final de unos 60.000 metros cúbicos, que rondan los 360.000 barriles diarios. La terminal de exportación podrá almacenar hasta un millón de metros cúbicos.
El mercado asiático se posiciona como un potencial destinatario por el crecimiento de la industria petroquímica. Su industria requiere el ingreso de buques de cierta escala, por lo que el objetivo es tener las capacidades en el puerto para responder a estos parámetros.
“Vamos a ser un país exportador de energía en 2031 generando 30.000 millones de dólares para el país. La ventana para acelerar el desarrollo de Vaca Muerta es ahora”, marcó Marín.