La deuda del Banco Central supera los $15 billones
El Banco Central (BCRA) ya acumula una deuda mayor a los $15 billones entre pases pasivos y Leliq. El primer instrumento, de corto plazo, suma un stock de casi $4 billones, mientras que sobre el segundo el organismo debe $11,4 billones.
En lo que va de 2023, los pasivos remunerados crecieron un 54%, unos 12 puntos por encima de la inflación acumulada en los primeros cinco meses del año, que fue del 42,2%. Se trata de bonos que el BCRA coloca entre los bancos para retirar de la calle los pesos que sobran, con el objetivo de evitar que presionen sobre la inflación y la brecha cambiaria.
El BCRA paga un interés a los bancos a cambio de retirar esos pesos. En el caso de los pases a un día, abona una tasa nominal anual (TNA) de 91%. Para las Letras de Liquidez (LELIQ), que tienen un plazo mensual, paga 97%, lo mismo que los bancos deben pagar a los depositantes minoristas por sus plazos fijos.
La deuda del BCRA, por ahora, se renueva sin problemas porque la demanda de crédito y -de dinero en general- está baja. Sin posibilidades de ir masivamente al dólar debido al cepo cambiario, los pesos quedan en los bancos y las entidades no tienen hacia dónde canalizar los excedentes. Por lo tanto, prefieren comprar pases o Leliq a cambio de una tasa.
Un problema para el próximo Gobierno. De acuerdo con los cálculos de la consultora LCG, los pasivos remunerados llegaron a representar un máximo de 12,3% del PBI al cierre de mayo. Además de la baja demanda de dinero, la compañía señaló que hubo un incremento en la oferta de pesos como resultado de la emisión para cubrir el déficit fiscal, así como por la compra de divisas a partir del “dólar soja 3”, la intervención en el mercado cambiario y el pago de los intereses que esa misma deuda genera.
El problema que los economistas ven en esta situación es que todos esos pesos que hoy están atrapados en las arcas del organismo monetario porque no encuentran mejor destino podrían eventualmente impulsar la brecha cambiaria.
“El stock de pasivos remunerados que genera intereses por prácticamente $1 billón mensuales es una complicación. Actualmente, con el cepo cambiario, hay una demanda de pesos ‘forzada’, pero si el próximo gobierno quisiera liberar las restricciones cambiarias, se encontraría con $15 billones de pasivos remunerados (como contracara de los depósitos a plazo fijo) y $5,5 billones de base monetaria (es decir, los pesos en la calle y en los bancos)”, expresó el economista Amilcar Collante.
En esa línea, alertó que el BCRA no tiene reservas netas para contener la demanda de dólares que se podría generar si se levantara el cepo y los bancos decidieran no renovar las Leliq y pases. Por lo tanto, la próxima gestión tendrá que lidiar con un patrimonio del BCRA que tiene deudas crecientes y un activo (reservas) en niveles mínimos.
Fuente: TN