
La baja sostenida del asado achica la histórica brecha de precios entre el sur y el resto del país. En septiembre, la carne subió 1,9%, mientras que el IPC avanzó 2,1%, o sea, volvió a moverse por debajo del promedio general de precios. Analistas no descartan una suba de precios en las góndolas de los distintos cortes de carne para los próximos meses.